Los ministros comunitarios de Agricultura y la Comisión han desbloqueado las negociaciones para la reforma de la Organización Común de Mercado (OCM) del vino. Según valoraciones de la Administración, esa nueva situación se ha producido ante la existencia de una postura más flexible en la propia Comisión en relación con sus planteamientos iniciales en cuestiones básicas como eliminación de los mecanismos de regulación de los mercados, arranque de viñedos o la chaptalización (añadido de azúcar al vino) para aumentar su grado.
Tras la reunión, la Comisión ha puesto sobre la mesa unas posiciones más flexibles a partir del mantenimiento del actual presupuesto de 1.300 millones de euros y respetando su distribución por Estados. Los países miembros asumen la aplicación de un sobre nacional y que cada Estado miembro pueda utilizar el mismo de acuerdo con lo que más interese a su sector. España no descarta la posibilidad de conseguir luz verde para utilizar parte de los fondos para eliminar excedentes vía destilaciones de forma transitoria, repitiendo la filosofía aplicada en la OCM de las frutas y hortalizas.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 29 de octubre de 2007