La investigación abierta por la Consellería de Medio Ambiente para determinar la causa de la muerte de peces en el embalse de Fervenza después de que la presa se secase apunta directamente a la gestión de la empresa Ferroatlántica, que explota la presa. El conselleiro Manuel Vázquez consideró ayer "sospechoso" que el resto de los embalses situados río abajo en el Xallas mantienen caudales óptimos, incluido el que abastece a los hogares de la Costa da Morte. Los técnicos de la Xunta intentan averiguar por qué la empresa de Villar Mir no atendió a las previsiones meteorológicas y decidió liberar tal cantidad de agua, y si lo hizo primando la producción de energía y sin atender la protección del medio natural. Además, el Juzgado de Corcubión está investigando un presunto delito contra el medioambiente y ya ha tomado declaración como imputado al responsable de producción de la presa.
A última hora de ayer, Ferroatlántica emitió un comunicado en el que la empresa niega haber incurrido en ningún delito medioambiental y asegura que "desde hace casi un mes, toda su actividad de generación hidroeléctrica ha estado condicionada exclusivamente al mantenimiento del caudal ecológico y a garantizar el suministro de agua a la población, debido a la situación de sequía". La dirección de Ferroatlántica asegura que "no ha abierto ninguna compuerta ni válvula en esta presa durante las últimas semanas, desde que el 28 de septiembre cuando interrumpió su actividad". La empresa advierte de que durante antes, durante la segunda quincena de septiembre, el embalse funcionó a un 25% de su capacidad.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 12 de noviembre de 2007