Muchos conductores alicantinos tuvieron ayer que armarse de paciencia. El reventón de una tubería de agua potable en la avenida de Dénia, una de las principales arterias de acceso a Alicante, levantó el asfalto de la carretera e interrumpió el tráfico de entrada a la ciudad.
La rotura se registró a la altura de la Clínica Vistahermosa a las 14.00 y obligó a cortar tres de los cuatro carriles de la concurrida avenida. Las retenciones se intensificaron por la tarde, a la salida de los centros de trabajo. Las colas llegaron a alcanzar los siete kilómetros de entrada y más de uno de salida. El centro de pantallas del Ayuntamiento explicó que el incidente obligó a bucar rutas alternativas. Técnicos del Consistorio trabajaron durante toda la tarde para reparar la avería y esperaban reabrir al tráfico esta mañana al menos en dos carriles de salida.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 15 de noviembre de 2007