El Departamento de Relaciones Institucionales sacará esta semana a información pública el anteproyecto de Ley de Fosas Comunes para que entidades, particulares y administraciones puedan presentar alegaciones. El resto de los departamentos de la Generalitat también podrán hacer aportaciones hasta el próximo 10 de diciembre.
Tras este periodo de alegaciones, el anteproyecto sobre localización e identificación de las personas desaparecidas durante la Guerra Civil y el franquismo en Cataluña será aprobado por el Consejo Técnico y, durante el mes de enero, por el Gobierno catalán. En el momento en que la norma sea revalidada por el Parlament, Cataluña será la primera comunidad autónoma con una legislación de este tipo.
El objetivo prioritario de la ley es restablecer la dignidad de las personas desaparecidas en ese periodo histórico, hacer efectivo el derecho de sus familiares a obtener información sobre el destino de los fallecidos y, si es necesario, recuperar los restos. Además, se prevé la señalización del lugar y su recuperación como espacio de memoria.
La Generalitat calcula que en Cataluña existen alrededor de 150 fosas comunes pero, a diferencia de otros puntos de España, la mayoría son de soldados anónimos.
El texto del anteproyecto de ley ha recibido la aprobación de una comisión de expertos integrada por 14 profesionales externos a la Administración autonómica y de reconocido prestigio en la historia, la arqueología y la antropología forense. Otra comisión asesora deberá emitir un informe preceptivo antes de la apertura de cualquier fosa común.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 19 de noviembre de 2007