El joven de 17 años que murió apuñalado a las puertas de una discoteca en una zona de ocio de Benalmádena (Málaga) fue enterrado ayer en la capital malagueña tras un funeral al que asistió un centenar de personas entre familiares y amigos. Los dos detenidos acusados de matar al joven, A.H.H., de 18 años, y F.M.P., de 20 años, Pasarán hoy a disposición judicial. La policía no busca a más implicados. El suceso ocurrió alrededor de las 6.30 del pasado domingo.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 20 de noviembre de 2007