El ex jefe del Comité de Seguridad (KGB) de la URSS falleció anteayer en Moscú a los 83 años. Kriuchkov, que había sido nombrado a la cabeza de los poderosos servicios secretos por Mijaíl Gorbachov, es considerado por muchos como principal organizador del intento de golpe de Estado para acabar con la perestroika y las reformas al sistema comunista.
Kriuchkov estudió Derecho y sirvió como espía en Europa oriental, lo que le une a Vladímir Putin, al que calificó en 2004 de "presidente de la esperanza". En 1974 fue seleccionado para encabezar el Primer Directorio del KGB, es decir el servicio de espionaje, y desempeñó un papel clave en la decisión de invadir Afganistán en 1979.
En 1988, Gorbachov le ascendió a presidente del poderoso KGB. Alexandr Yákovlev, el padre de la glásnost o transparencia informativa nacida en la perestroika, ha dicho que en esa época Kriuchkov se hacía pasar por "un reformista radical", criticaba el sistema agrícola soviético de koljóses y sovjóses y también a una serie de dirigentes del KGB.
Después cambió radicalmente: comenzó a hablar de la "amenaza de la guerra fría" y a ver agentes occidentales por doquier. Pero el intento de golpe que apoyó, en vez de frenar las reformas, las aceleró, acercando así el fin de la URSS. Por cierto, Kriuchkov acusó a Yákovlev de espiar para EE UU. Detenido tras el fracaso del golpe, más tarde fue amnistiado.
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* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 26 de noviembre de 2007