Siempre me ha gustado Manuel Marín como político. Desde aquella lucha de días muy duros para entrar en Europa llevando unas negociaciones muy difíciles pero positivas. Y eso fue lo mejor que nos ha pasado en mucho tiempo. Ahora ha expresado con palabras lo que muchos pensamos. Es imposible que la política se quede en lo que ha sido esta legislatura, una política basura, en la que, aunque muchos no lo quieran reconocer, el PP ha dividido al país. No quiero con esto exculpar al Gobierno, que ha actuado sin experiencia y con tropiezos.
Pero la actuación mediática con el 11-M ha creado una opinión falsa de las cosas que a muchos convenció de acciones innombrables no probadas. Ellos han triunfado y están orgullosos de ello. Vender periódicos y aumentar audiencia es su objetivo.
Claro que tampoco tenemos muchos espejos donde mirarnos. En un mundo en el que la izquierda radical la lidera un tal Chávez, y la derecha un tal Bush. No podía la política caer tan bajo. Yo no lo comprendo, pero aquí pasa lo mismo... y tampoco lo entiendo.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 9 de diciembre de 2007