El Parlamento Europeo aprobó ayer una resolución en la que pide a los Estados de la UE que "como mínimo" prevean la opción de retirar los fondos públicos de los partidos políticos que no condenen el terrorismo o la violenia. La resolución, que no es jurídicamente vinculante, no menciona ningún caso concreto, pero responde a la aparición de movimientos extremistas o "paramilitares" con ideologías como el "racismo", el odio religioso, el antisemitismo, la homofobia, la misoginia o el "ultranacionalismo".
La resolución pide que todos los Estados prevean la posibilidad, tras un resolución judicial, de retirar el apoyo financiero público a partidos con estas características.
También reclama a "los Estados miembros que ya contemplan esta posibilidad que recurran a ella sin demora". La mención específica a la no condena de la "violencia y el terrorismo" fue introducida por una enmienda del eurodiputado conservador alemán Manfred Weber (Partido Popular Europeo, PPE). El texto original había sido pactado por los principales grupos (PPE, Socialista, Liberales, Verdes, Unión por la Europa de las Naciones, e Izquierda Unitaria).
En España, el pasado mes de junio, en plena polémica por la presentación de listas de ANV en las elecciones del 27-M, el Senado eliminó una facultad del Gobierno para retirar la financiación a partidos, incluso legales, que incidan en algún supuesto de la Ley de Partidos. Las subvenciones, de acuerdo con una ley pactada por PP y PSOE en 2003, podía retirarlas el propio ministro del Interior a discreción. Esta facultad nunca se utilizó, y en la Ley de Financiación de Partidos, el Senado derogó esa posibilidad, con la oposición del PP, y estableció que debe ser un juez quien retire la financiación.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 14 de diciembre de 2007