El PNV no se ha planteado tomar ninguna decisión sobre el cargo en las Juntas Generales de Vizcaya de Miren Urrezti, uno de los cuatro militantes expulsados del partido por el tribunal de la junta de Ondarroa. Todos ellos formaban parte del grupo de nueve ediles electos peneuvistas en ese Ayuntamiento que, por dos ocasiones, se negaron a tomar posesión como concejales por la presión del entorno de ANV y Batasuna.
Además de Urrezti, la expulsión, que va a ser recurrida por los afectados, afecta al cabeza de lista y anterior alcalde de Ondarroa, Aitor Maruri; y a los militantes María Dolores Etxano y José Antonio Urrezti.
Fuentes de la ejecutiva vizcaína del PNV indicaron que "no se ha planteado nada" respecto al cargo de juntera de Urrezti. Precisaron que no hay una sentencia firme y que será un asunto que deberá tratar la nueva ejecutiva, que se elegirá el 11 de enero, aunque lo previsible es que no se adopte ninguna decisión hasta que terminen todos los recursos. Los expulsados pueden acudir al tribunal regional de Vizcaya y luego al nacional. Errazti, que el martes acudió al pleno de las Juntas en Gernika, guarda silencio al igual que los otros afectados. "No voy a hablar nada sobre esto", dijo a EL PAÍS.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 14 de diciembre de 2007