Nicolas Sarkozy realizó ayer una visita relámpago a Afganistán, la primera de un jefe de Estado francés. Sarkozy se entrevistó con su homólogo, Hamid Karzai, a quien garantizó "apoyo político y militar a largo plazo", y visitó a los 1.600 soldados franceses destacados en Kabul. "Aquí se libra una guerra contra el terrorismo y el fanatismo que no podemos perder", dijo Sarkozy. El mismo mensaje recibió Karzai del nuevo primer ministro australiano, Kevin Rudd, que también viajó a la capital afgana.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 23 de diciembre de 2007