Una turba quemó ayer vivos a más de 30 mujeres y niños que se habían refugiado en una iglesia de Eldoret (oeste de Kenia) para huir de la violencia desatada por la victoria de Mwai Kibaki en las elecciones del 27 de diciembre, y que ya han ocasionado casi 250 muertos. En la foto, choques entre grupos rivales ayer en Nairobi.
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Editorial en la página 28
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* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 2 de enero de 2008