Los vecinos de la pedanía oriolana de Torremendo comunicaron ayer al presidente de la Diputación de Alicante, José Joaquín Ripoll, del PP, su oposición a la ubicación en la zona de la planta comarcal de basuras. La instalación, que dará servicio a 27 municipios y tratará unas 300.000 toneladas de basuras al año, ha sido adjudicada al grupo Cespa-Ortiz. Los vecinos de la pedanía aprovecharon ayer una reunión de Ripoll con la alcaldesa de Orihuela, Mónica Lorente, para expresar su rechazo a la planta.
El portavoz de los vecinos, Sebastián Andreu, resaltó el negativo impacto de la industria, "que se ubicará a menos de dos kilómetros del caso urbano de la pedanía y en el entorno del pantano de La Pedrera". Ripoll garantizó a los vecinos que los camiones con la basura no pasarán por la población y señalaron que el emplazamiento concreto de la planta aún no está determinado.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 10 de enero de 2008