Francisco Luis González Fernández era hasta ayer conocido en Conil de la Frontera (Cádiz) como el jefe de la Policía Local. Desde ayer es conocido también por una detención: la suya. González fue arrestado por la Guardia Civil como supuesto autor de delitos de estafa, falsedad documental, hurto de vehículo a motor y omisión del deber de perseguir el delito.
González, de 46 años de edad, habría venido comerciando con los coches recuperados por la Policía Local que habían sido robados a sus dueños, según las primeras investigaciones. El agente, supuestamente, en lugar de devolver el automóvil a su legítimo propietario, notificaba que habían fracasado las pesquisas y, una vez manipulada la documentación, vendía los vehículos en el mercado negro.
Un juzgado de Chiclana, tras investigar el caso, ordenó el arresto del responsable policial y declaró el secreto del sumario. La investigación sigue abierta y no se descartan nuevas detenciones.
El jefe de la Policía Local ocupó su plaza hace dos años, aunque desde hace meses se encontraba de baja médica. Su labor al frente de la jefatura ha sido objeto de quejas. En enero de 2007, un joven de Conil presentó una denuncia contra González por un presunto delito de agresión y abuso de la autoridad.
En su declaración, el denunciante aseguró que el policía le amenazó con "cortarle el cuello, porque era un chulo". Su detención provocó ayer una gran sorpresa en el Ayuntamiento, gobernado por Izquierda Unida.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 10 de enero de 2008