Se llamaba Tatiele de Sousa Neres, tenía 20 años, era brasileña, trabajaba en un burdel de Pamplona y ayer fue hallada muerta en una vivienda del barrio de la Milagrosa de la ciudad. La encontraron agentes de la policía municipal, que acudieron al domicilio de su compañero sentimental, Tiago Rosa Silva, también brasileño, también trabajador del burdel, tras ser alertados por los vecinos, que habían escuchado una gran discusión de madrugada. La Delegación del Gobierno en Navarra apunta como principal hipótesis un asesinato de género. Sería el quinto del año.
Ella estaba tendida sobre el suelo, en medio de un gran charco de sangre, y con la garganta seccionada con un arma blanca. Él, que negó ser el autor del crimen, gravemente herido, aunque fuera de peligro, en el patio de luces del inmueble, tras tirarse de un cuarto piso. Ambos se encontraban en España en situación irregular, y tenían abiertos sendos expedientes de expulsión.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 19 de enero de 2008