"¿Qué? ¿Desconocían que yo estaba embarazada? ¡Por Dios! Bueno... si ellos dicen eso... vamos... para tener amenaza de aborto, tienes que estar embarazada, ¿no?", dijo, entre perpleja e indignada, Elena Rivas, una de las cinco profesoras despedidas por darse de baja al estar embarazadas y sufrir riesgos de aborto. El delegado de Educación en Sevilla, Jaime Mougán, justificó el despido en que desconocía que estaban en estado y que esta decisión se enmarcaba en la lucha de la delegación contra "la picaresca, el engaño o la mala fe". Este caso obligó al presidente del Gobierno andaluz, Manuel Chaves, a pedir personalmente disculpas públicas - "Ha sido un error grave de la Junta", admitió- y será analizado hoy por el Consejo de Gobierno.
La Consejería de Educación enmendó la pasada semana a la Delegación en Sevilla y anunció que readmitirá de inmediato a estas interinas.
Las reacciones que generó ayer este episodio fueron completamente dispares. Mientras la consejera justificó las explicaciones de su delegado y dijo que el asunto está resuelto, el secretario de organización del PSOE andaluz, Luis Pizarro, expresó abiertamente su malestar con la actuación de Mougán.
"No ha estado a la altura de las circunstancias. El presidente andaluz, sí. No me han gustado nada las explicaciones del delegado. Podría haber dicho lo mismo que el presidente y habría evitado que el presidente hubiera tenido que salir", lamentó.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 22 de enero de 2008