El primer título de su historial balonmanístico le llegó a la selección de Dinamarca de la forma más inesperada. Perdía con Croacia 4-0 a los siete minutos de partido, pero todo cambió cuando Kasper Hvidt, el portero del Barça, comenzó a pararlo todo. La remontada de los daneses fue espectacular, hasta dejar el marcador en 24-20. Francia se llevó el bronce. Dinamarca fue bronce en el Mundial del año pasado y en los Europeos de 2004 y 2006.
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* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 28 de enero de 2008