La situación internacional continúa poniendo a prueba la capacidad de subida de los mercados de valores europeos, que ayer tuvieron que dar marcha atrás ante las malas noticias que llegaban desde Estados Unidos.
El Ibex 35 terminó con una subida del 0,16% y por encima de los 13.500 puntos, aunque en los mejores momentos del día llegó hasta los 13.652,10 puntos, tras ganar el 1,17%.
Los problemas, en lo que respecta a la Bolsa española, mostraron una clara tendencia a acumularse en los grandes valores, lo que se notaba más al final del día, cuando el Ibex Medium ganaba el 1,82% y el Ibex Small Cap el 1,75%. La decisión del departamento de análisis de un banco suizo de rebajar fuertemente el precio objetivo de los valores bancarios españoles hizo mella en el ánimo de los inversores y en el Ibex 35.
Los indicadores económicos que llegaban desde Estados Unidos invitaban a la reflexión, aunque no eran muy diferentes de los de los meses anteriores. Los pedidos a fábrica subieron el 2,3% en diciembre, la menor subida en cinco meses, y el total del pasado año se sitúa en el 1,4%, el peor dato en cinco años. La cifra de despidos anunciada por las empresas creció en enero un 69% sobre el mes anterior, al tiempo que el Gobierno anunciaba una tardía revisión a la baja de sus previsiones de crecimiento para este año y el próximo.
La apertura a la baja de la Bolsa de Nueva York afectó al cierre de los mercados europeos hasta anular la mayor parte de las ganancias conseguidas.
Las pocas esperanzas que tienen los inversores sobre una rebaja de los tipos de interés en Europa se vinieron abajo con el dato del índice de precios industriales, que termina el pasado año en el 4,3%.
No obstante, posibles operaciones corporativas animaron a valores medianos, como Solaria, supuestamente pretendida por Iberdrola, e Iberia, que dio el salto tras anunciar la compañía italiana Air One que estudia lanzar una OPA vinculante por Alitalia.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 5 de febrero de 2008