El lector veterano puede haber perdido la cuenta de las veces que The Mission han visitado Valencia. Tal es la relación de fidelidad que la banda británica ha tenido siempre, desde los 80, con la legión de seguidores con la que cuenta en esta ciudad.Primero como banda en la cresta de ola y, más tarde, ya arrimados sin disimulo a ese circuito de la nostalgia cuya rentabilidad parece no tener fin. Y es que esta fue siempre una tierra abonada al culto por el rock de ribetes góticos, denso, pomposo y grandilocuente, tal y como la banda de Wayne Hussey lo ha entendido a lo largo de su discografía. Esta noche se presentan con un nuevo álbum bajo el brazo, God is a bullet, en la que anuncian como su gira de despedida final. Aunque, tal y como está el patio -y más teniendo en cuenta sus precedentes-nadie debería poner la mano en el fuego por la veracidad de su finiquito. La cita, en el Heineken Greenspace (Calle Juan Verdeguer, 16-24)) a las 21.30h, con Dead Guitars como teloneros.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 11 de febrero de 2008