Los artistas vascos han determinado la idiosincrasia del Museo de Bellas Artes de Bilbao, recordaba ayer su director, Javier Viar. El pintor Manuel Losada (Bilbao, 1865-1949) fue su primer director y estuvo al frente de la pinacoteca a lo largo de cuatro décadas. Otro autor, Aurelio Arteta, asumió en 1924 la dirección del Museo de Arte Moderno de Bilbao, que años más tarde se fusionó con el de Bellas Artes para dar paso a la actual colección. Los artistas también estuvieron cerca de las instituciones para orientar las compras cuando las noticias de lo que ocurría en las capitales del arte circulaban con dificultad, y muchos otros han mostrado su apego al museo colaborando en su gestión o a través de la donación de sus obras.
Los artistas vascos presentes en la colección del Museo de Bellas Artes, los más cercanos a su vida y a su historia, conforman desde ayer una exposición temporal que acompaña la edición de la Guía artistas vascos. Museo de Bellas Artes de Bilbao, la primera de su tipo que edita el centro.
La publicación arranca cronológicamente con una obra renacentista de Juan de Anchieta (Azpeitia, 1533-Pamplona, 1588), un altar portátil realizado en madera policromada en el siglo XVI, y avanza hasta hasta un DVD de Sergio Prego (Hondarribia, 1969). Entre estos límites se han seleccionado 118 autores que presentan 224 obras. La edición de la guía ha sido realizada por Viar y Marta García Maruri, subdirectora del museo. La Guía artistas vascos complementa la nueva edición de la guía general de la colección, editada en 2007.
¿A quiénes se ha considerado artistas vascos? El criterio, explica Viar, se ha basado en su lugar de nacimiento o en la implicación en los acontecimientos artísticos ocurridos "dentro de lo que territorialmente o culturalmente permite la consideración de arte vasco". A partir de Juan de Anchieta y unos pocos nombres que llegan hasta los últimos años del siglo XVII, la obra salta hasta mediados del siglo XIX. Es el tiempo de Eduardo Zamacois. Siguiendo el hilo cronológico aparecen las obras de Anselmo Guinea, Darío de Regoyos, Adolfo Guiard, Francisco Iturrino, Manuel Losada e Ignacio Zuloaga, entre otros.
El costumbrismo de principios del siglo XX figura en la guía y en la muestra representado por la pintura de Aurelio Arteta y Valentín de Zubiaurre. Ya en la segunda mitad de la centuria pasada llegan las obras de Jorge Oteiza, Eduardo Chillida, Agustín Ibarrola y los artistas que se unieron en los efímeros grupos de la escuela vasca: Gaur, Emen y Orain. A partir de entonces los caminos se diversificaron con propuestas tan distintas como las de Andrés Nagel, Darío Urzay, Mari Puri Herrero, Jesús Mari Lazkano, Txomin Badiola, Pello Irazu, Vicente Ameztoy o José Zugasti.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 12 de febrero de 2008