La comisión especial que investiga en el Parlamento vasco los sucesos del 3 de marzo de 1976 en Vitoria -cinco obreros murieron por disparos de la policía y otras cien personas resultaron heridas tras disolver la asamblea celebrada en una iglesia- acordó ayer pedir la comparecencia de Manuel Fraga, entonces ministro de Gobernación y actual senador del PP. También serán llamados otros dos ministros de la época, Rodolfo Martín Villa, que tenía la cartera de Relaciones Sindicales, y Alfonso Osorio, titular de Presidencia, además del ex gobernador civil de Álava, Rafael Landín, y el ex comisario de la policía Manuel García Abad.
Los sucesos se produjeron tras dos meses de huelgas y movilizaciones laborales, al disolver la policía una multitudinaria asamblea obrera, que se celebraba en el interior de una iglesia. El desalojo se saldó trágicamente. La ciudad recuerda la fecha cada año con una manifestación.
La Asociación de Víctimas del 3 de marzo consiguió en febrero de 2007 que la Cámara, a instancias del tripartito vasco y con el apoyo de EHAK, constituyera una comisión especial sobre los hechos. Ésta inició su trabajo a finales de noviembre pasado y parte de un informe realizado por una prestigiosa entidad académica de la Universidad del País Vasco, el Instituto de Historia Social Valentín de Foronda. El objetivo es establecer las responsabilidades de los hechos.
"Estaba de viaje"
El acuerdo instaba también al Gobierno a equiparar a las víctimas del 3 de marzo con las de la Guerra Civil y la dictadura, y a establecer para ellos indemnizaciones con idéntico tratamiento a las víctimas del terrorismo.
Las personas citadas no tienen obligación de comparecer ante la Cámara autonómica, pero podrán aportar voluntariamente su testimonio, en persona o por escrito. Manuel Fraga no aclaró ayer si acudirá o no. En la fecha de los sucesos se encontraba de viaje en Alemania, recordó a este periódico, y su cargo lo ocupaba en ese momento -"por el decreto oportuno", subrayó- Adolfo Suárez, entonces ministro secretario general del Movimiento.
"Cuando regresé, me personé en Vitoria y contribuí a encauzar la situación. Los días sucesivos se tomaron medidas como la destitución del gobernador civil y no se produjeron más incidentes", explicó Fraga.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 14 de febrero de 2008