Desde este mes, todos los Passat ofrecen más. Para empezar, reciben un motor 1.8 TSi turbo de 160 CV con cambio de seis marchas que releva al actual 2.0 FSi y mejora sus prestaciones y consumos. Gasta 7,6 litros y otorga una respuesta suave pero briosa: acelera de 0 a 100 km/h. en 8,6 segundos y alcanza 220 km/h. Se vende desde 28.150 euros (29.660 con carrocería familiar), sólo 200 euros más que el anterior 2.0 FSi. En diésel, y a partir de marzo, los 2.0 TDi se sustituirán por otros con raíl común, de igual potencia pero con un tacto más fino y silencioso. El 1.4 TSi de 122 CV se mantiene como la opción más asequible de la gama Passat: 25.340 euros.
Junto a los motores varían también los equipamientos. El básico Trendline desaparece -lo que eleva las tarifas unos 2.000 euros-, pero a cambio los demás vienen más nutridos y no suben de precio. Todos incluyen seis airbags, ESP, climatizador, radio-CD con MP3 y llantas de aleación. Pero la variante ecológica Bluemotion (a partir de 25.480 euros) suma ahora asiento del conductor eléctrico y ordenador; el acabado Advance añade volante multifunción y antinieblas, y el Highline viene con faros bixenón y alarma. El Sportline se ha sustituido por el nuevo R-Line, que mantiene la suspensión rebajada y los asientos envolventes y estrena una estética específica de corte deportivo. También llegan nuevas opciones, como la función de aparcamiento automático y un GPS a color, con pantalla táctil y memoria de 30 gigabytes.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 16 de febrero de 2008