Nacida en Roma en 1966, la mezzosoprano Cecilia Bartoli ocupa desde hace más de dos décadas un lugar destacado en el firmamento de las artistas de la música clásica. Con esta carta de presentación recala hoy (20.00) en el Auditorio Kursaal de San Sebastián, donde presentará su particular homenaje a la también mezzosoprano María Malibrán, la primera gran estrella de la lírica de la historia. Con las entradas agotadas, interpretará arias de ópera que hicieron mundialmente famosa a su antecesora.
Bartoli estuvo por primera y última vez en la capital guipuzcoana hace 16 años. Entonces actuó en el teatro Victoria Eugenia, donde ofreció un recital de Rossini. Este compositor forma parte también del repertorio de hoy, junto a autores como Giuseppe Persiani, Vincenzo Bellini, Charles-Auguste de Bériot y Manuel del Pópulo Vicente García.
Los nuevos papeles operísticos de Bartoli, sus conciertos y sus discos son esperados con gran entusiasmo en todo el mundo. La cifra de seis millones de cds vendidos y los numerosos premios obtenidos reflejan el inmenso éxito de sus álbumes Vivaldi, Gluck, Salieri y Opera proibita.
La gran diva de la lírica estará acompañada en el escenario del Kursaal por la Orquesta de Cámara de Basilea, fundada en 1984 y considerada una de las agrupaciones más prestigiosas de Europa. Ha grabado numerosos discos con música del siglo XX y toca junto a solistas de la talla de Philippe Herreweghe o Carolyn Emma Kirkby.
A la batuta estará Julia Schröder, quien es concertino de la Orquesta de Basilea desde hace cinco años. Actúa como solista con la Sinfónica de Basel, la Camerata Stuttgart y la Sinfónica de Frankfurt. Y desde 2005 es solista habitual de la Sinfónica de Nurember. Este mismo año empezó a colaborar con Bartoli, así como con Giovanni Antonini.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 20 de febrero de 2008