El ex presidente del Gobierno, que hoy proseguirá su periplo gallego por A Coruña y Lugo, se afanó por defender incluso los aspectos más controvertidos de la gestión de Rodríguez Zapatero. Tras aludir al superávit presupuestario, "que ya quisieran Francia, Alemania, Inglaterra e Italia" ironizó contraponiendo el canon digital con "el canon del registrador de la propiedad de" de Mariano Rajoy. González también respaldó la posición del Gobierno contraria al reconocimiento de la independencia de Kosovo y la idea de la Alianza de Civilizaciones promovida por Zapatero. "Entre un diálogo y un conflicto de civilizaciones, me quedo con el diálogo", sentenció González.
La defensa del Ejecutivo incluyó ataques a a los grupos sociales que se le han enfrentado con mayor dureza: "Hace tiempo que no veía a obispos manifestándose, que no veía a ningún militar decir lo que hay que hacer políticamente, algo que me retrotrae al siglo XIX".
"Felipe representa los mejores valores de la sociedad española y del socialismo democrático", había dicho previamente Emilio Pérez Touriño, secretario general del PSdeG, que también se declaró "más a gusto que nunca por el ambiente de confianza y de optimismo" y "especialmente orgulloso por tener con nosotros a Felipe, el hombre que creó el Estado del bienestar". "No estuvo nada mal aquella cosecha de tu bodega del 82", dijo Touriño, identificándose e identificando a Caballero como ejemplos de aquella añada.
El PP, dijo Touriño, es "el partido del miedo y de la mentira, mienten para meter miedo, intentan criminalizar a los inmigrantes, racionando sus derechos". "Llegó tarde a todo", añadió, "a la España plural, a la de la solidaridad, y ahora llegará tarde al 9 de marzo porque los vamos a derrotar. No habrá miedo que nos pare".
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 21 de febrero de 2008