El AVE Madrid-Barcelona ha cumplido una semana y ayer tocaba hacer recuento de cómo ha funcionado. Con los datos de los primeros siete días, los dirigentes sacan pecho y muestran unas cifras en crecimiento.
El primer día, el pasado 20 de febrero, viajaron entre Madrid y Barcelona (en ambos sentidos) 3.085 personas. El martes pasado fueron ya 5.100 los viajeros de la misma línea.
En total, los primeros siete días de vida, 24.260 pasajeros han realizado el trayecto entre ambas ciudades, lo que supone un incremento del 132% respecto a los 10.453 que utilizaron en la misma semana de 2007 el tren convencional. La ocupación media de los trenes en día laborable fue del 60%. La rentabilidad se alcanza con el 70%, un porcentaje que Renfe está convencida que alcanzará en muy poco tiempo.
Para ofrecer estas cifras comparecieron el presidente de la línea, Antonio González, y el de Renfe, José Salgueiro. Ambos coincidieron en felicitarse por la puntualidad, el 99,47%, empañada apenas, según explicaron ambos, por unos robos de cable en la zona de Alcalá de Henares.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 28 de febrero de 2008