La juez acaba de archivar por tercera vez el caso. Es otro revés más, pero los familiares de las víctimas del accidente del Metro ocurrido el 3 de julio de 2006, en el que perdieron la vida 43 personas y quedaron heridas otras 47, se mantienen firmes y recurrirán la decisión. Como cada mes, ayer se concentraron en la plaza de la Virgen de Valencia para recordar a los fallecidos y reiterar sus peticiones: una investigación transparente e imparcial que dé respuesta a todos los interrogantes del suceso; un trato justo a las víctimas, y la asunción de las responsabilidades que correspondan por el accidente. Para que no se repita.
Enric Chulio, portavoz de la asociación de familiares, destacó que "la línea 1 del metro sigue siendo la vergüenza del transporte público valenciano" y que los políticos de la Generalitat "no han dado la cara". "Nada ha cambiado" desde aquel día trágico y por eso volverán a concentrarse el próximo día 3. "No nos resignamos", dijo Chulio, que también subrayó que son independientes, que no se casan con "ningún partido político". Aunque acudan a apoyarles, como ayer fue el caso de Carmen Alborch.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 4 de marzo de 2008