Peter Hasselriis quería que fueran las mujeres las que se vieran seducidas ante las tiendas de tecnología y arrastraran a sus esposos hacia allí. El dueño de Scandyna, una firma danesa que produce aparatos electrónicos, piensa que a ellas les atrae el vinilo de colores y la textura de la madera natural. Por eso ha diseñado una línea de altavoces, amplificadores y subwoofers de alta fidelidad que más bien parecen pequeñas esculturas. El orgulloso creador de la familia de minipods o del drop, que parece una gota de líquido animada, siempre desconfió de los viejos sistemas hi-fi de cajas negras o plateadas de metal. Ahora, sus pequeños y versátiles bulliciosos pueden lucir en estanterías, colgados del techo o de la pared, mientras amplifican los sonidos en la forma e intensidad que el usuario desee. La familia incluye el Cinepod, con sonido envolvente cinematográfico o el Minibase, que permite ganar en frecuencias bajas. En España, los distribuye Sky Experience y también se consiguen en tiendas especializadas. www.scandyna-speakers.com.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 4 de marzo de 2008