La Agencia Catalana del Agua (ACA) considera que el vertido de Repsol Química al río Francolí que hace un mes causó la muerte de miles de peces es un delito ecológico. Los servicios jurídicos de la agencia han remitido a la fiscalía el expediente informativo que abrieron para investigar las causas del vertido, y el texto concluye que se trató de un "vertido no autorizado ni autorizable" de aguas residuales no tratadas a través de los conductos de desagüe de las aguas pluviales.
El pasado 6 de febrero aparecieron en el Francolí miles de peces muertos, a la altura del municipio de El Morell (Tarragonès). Los técnicos de la Generalitat recogieron durante días más de una toneladas de peces muertos.
Al día siguiente, la Generalitat abrió dos expedientes informativos. El Departamento de Innovación, Universidades y Empresa convirtió este expediente en sancionador a finales de febrero, con lo que la compañía afronta una multa máxima en este proceso de 90.000 euros. La investigación de este departamento incidió en la "mala praxis" de la compañía.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 8 de marzo de 2008