Dos pifias de tramposo condenaron al Betis y alzaron al Racing, que se arrima con persistencia a los puestos nobles de la tabla. Un penalti simulado y una tarascada como último defensor sonrojaron al Betis, incapaz ante la embestida contraria.
Apoyado en el costado izquierdo, en un Speedy González que cuenta cohetes por piernas, el Betis hurgó sobre la retaguardia derecha adversaria. Enterado el Racing, tiró de las coberturas de Duscher y Colsa para disolver al extremo y desdibujar por completo al rival. Sin más armas, el Betis optó por la estafa y el timo. Primero lo practicó Edu y luego Melli. Les salió rana y crucificaron a su equipo.
Edu apenas participó del juego. Y cuando lo hizo, se equivocó; Capi leyó su desmarque y le lanzó un pase que le plantó ante Toño. Pérfido, tocó el balón y simuló un penalti. Un error porque de no tirarse podía haberse ahorrado la cartulina, alcanzado el cuero y marcado. No aprendió la lección Melli, que tras un fallo defensivo tumbó a Tchité, que enfilaba el marco rival sin más oposición que el meta. Roja directa y arreón del Racing, que penalizó sin remisión.
RACING 3 BETIS 0
Racing: Toño; Pinillos, Navas, Garay, Ayoze; Pablo Álvarez (Serrano, m. 46), Duscher (Jonatan, m. 76), Colsa, Jorge López; Munitis (Smolarek, m. 68) y Tchité. No utilizados: Coltorti, Sergio Sánchez, Moratón y Orteman.
Betis: Ricardo; Damià, Juanito, Melli, Vega; Capi (Juande, m. 73), Rivera; Edu, Arzu, Mark González (Caffa, m. 89); y Pavone (Odonkor, m. 81). No utilizados: Casto, Ilic, Somoza, Sobis y Odonkor.
Goles: 1-0. M. 49. Duscher puntea tras un error de Ricardo. 2-0. M. 58. Garay remacha un balón muerto. 3-0. M. 88. Tchité bate por raso a Ricardo.
Árbitro: Pérez Lasa. Mostró la cartulina amarilla a Edu, Arzu. Roja directa a Melli (m. 48).
Unos 21.000 espectadores en El Sardinero.
Garay lanzó la falta y Ricardo, despistado, repelió el cuero hacia el centro. Duscher, atento, punteó el balón. Al siguiente remate de Tchité, Ricardo corrió la misma suerte y Garay aprovechó el rechace. Tchité, en el último resuello, puso la puntilla y validó el sueño de la Champions.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 10 de marzo de 2008