Como si fuera una señal para los melómanos despistados, La Pasión según San Mateo, de Johann Sebastian Bach, acude todos los años a su cita en el Palau de la Música de Valencia. Es como una señal de que la Semana Santa está próxima. El oratorio de Bach es un clásico de la música sacra desde que, el Viernes Santo de 1729, se estrenó en la iglesia de Santo Tomás de Leipzig bajo la dirección del propio compositor. La obra, compuesta en la época de mayor frenesí creativo del músico alemán, comparte con las otras Pasiones de Bach (La Pasión según San Marcos y La Pasión según San Juan) un puesto de honor dentro del repertorio de las obras musicales de confesión protestante. La versión que ofrece hoy el Palau de la Música, que se adelanta en una semana a las fechas en que suele programarse desde hace 20 años, por su coincidencia con las fiestas falleras, viene de la mano de la prestigiosa Deustche Kammervirtuosen, uno de los mejores conjuntos especializados en música sacra, que, junto al coro de niños de Windsbach, recreará la obra tal y como se interpretaba en la época en la que Bach compuso este oratorio que, despojado o no de su carácter religioso, es una de las composiciones corales más monumentales de la historia de la música clásica.
LA PASIÓN SEGÚN SAN MATEO
Oratorio de Johann Sebastian Bach interpretado por la Deustche Kammervirtuosen y el coro de niños de Windsbach. Palau de la Música. Paseo de la Alameda, 30. Valencia. A las 20.15.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 12 de marzo de 2008