Galicia es la comunidad más azotada por este fenómeno. En los últimos nueve meses se han detectado carreras o exhibiciones tanto de coches como de motos en más de una veintena de puntos. En Lugo, un Ferrari y un Mitsubishi fueron denunciados por competir en las carreteras de la provincia a más de 200 por hora. Una competición similar fue abortada el 17 de febrero, después de que la Guardia Civil recibiese una llamada anónima de un conductor que vio a varios coches listos para correr en el tramo de la Nacional V-I conocido como Costa da Sal, un trecho de fuerte pendiente en el municipio coruñés de Aranga, con 13 curvas enlazadas, donde semanas antes se detectaron carreras de motoristas. Al llegar a la zona, los agentes se encontraron a unos 100 conductores con coches de gran cilindrada en el arcén y decenas de espectadores en las cunetas.
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* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 23 de marzo de 2008