Las precipitaciones de los últimos días en varios puntos de Andalucía apenas han modificado la situación de los embalses. En la cuenca del Guadalquivir, la más grande, el volumen medio de agua embalsada era ayer del 34,8%, el mismo porcentaje que hace una semana y también que hace un mes, y apenas dos puntos por encima con relación al inicio del año hidrológico, en octubre. Con respecto a hace un año, los embalses de la cuenca están ocho puntos por debajo.
Ocho pantanos de la cuenca del Guadalquivir, la mayoría de la cabecera en las provincias de Jaén y Granada, permanecen en situación de emergencia (con agua para algo más de un año) y otros cinco en alerta (para dos años). Desde la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG) se afirmó ayer que con el agua embalsada hay reservas para el abastecimiento dos años, aunque en algunas zonas, como en la comarca jiennense de Andújar, que se abastecen del Rumblar, las reservas son para poco más de un año.
"Las lluvias caídas han sido muy irregulares, sólo para aliviar la grave situación de los regadíos", señala Juan Saura, director técnico de la CHG.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 25 de marzo de 2008