El pederasta y presunto asesino de Mari Luz, la niña de Huelva hallada muerta el pasado 7 de marzo, no es el único culpable que seguía en la calle tras cometer delitos de abuso a menores.
La Guardia Civil de Los Barrios (Cádiz) puso ayer a disposición de la justicia a J.P.C., gaditano de 68 años, que contaba con una orden internacional de búsqueda y captura por varios delitos de agresión sexual. Fue detenido el pasado sábado tras comprobar que el pederasta, con sentencia firme de la Audiencia de Madrid, vino huyendo de la justicia desde la localidad madrileña de Fuenlabrada, donde cometió los abusos. Según la Guardia Civil, el detenido aprovechó el tiempo transcurrido entre el recurso a la sentencia y su contestación para refugiarse en el domicilo de un familiar que residía en Los Barrios.
En Alcalá del Río (Sevilla), agentes de la Policía Nacional arrestaron ayer a A. M. C, de 46 años y sin antecedentes policiales, como presunto autor de delitos de corrupción de menores y pornografía infantil a través de Internet.
A.M.C. usaba el programa Messenger y se hacía pasar por una menor llamada Vanesa. Puso una foto de una adolescente desnuda con lo que conseguía que muchos jóvenes -varones- se pusieran en contacto con ella/él. Los padres de uno de los menores, de trece años, denunciaron que alguien había invitado a sus hijos a desnudarse frente a la cámara que tenían instalada para pasar imágenes por Internet (Web Cam).
La policía encontró más de 4.000 archivos de imágenes con contenido pedófilo. La Autoridad Judicial ha decretado su ingreso en prisión.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 1 de abril de 2008