En la página 47 de su edición del sábado 29 de marzo, sección Gente, se titula: "Los Marichalar, expropiados". Nos consta el interés del corresponsal en Soria, Carlos Tomeo, de recabar nuestra opinión, que no fue posible por estar de viaje. Esperando que en futuras ediciones su periódico pueda ampliar la información sobre este asunto, la construcción de un gran polígono industrial de 117 hectáreas junto a Numancia, que supone un irreparable atentado paisajístico, cultural, histórico y arqueológico al patrimonio de Numancia y de Soria, le ruego que aclare que no hemos sido expropiados.
Lo único que pasa es que los técnicos del Ayuntamiento de Soria han concluido resolver negativamente el recurso de reposición planteado contra el inicio de la expropiación.
Caben además muchos más recursos contenciosos; por tanto, no hemos sido expropiados. Considerar que el informe de los técnicos municipales implica la expropiación viola todas las garantías contra la propiedad y nos situaría ante una confiscación. (...)
El Instituto de España, las reales academias de la Historia y de Bellas Artes de San Fernando, la Asociación Hispania Nostra, la Sociedad Española de Estudios Clásicos, el Institut Catalá d'Arqueologia Clàssica y 76 profesores de Historia, Geografía y Arte de la UNED han manifestado su preocupación por los daños irreversibles que acarreará a Numancia y a Soria la construcción del polígono industrial.
Lo asombroso de este asunto es que Soria no necesita suelo industrial; en las mejores previsiones demanda 1,5 hectáreas al año, y el PGOU de 2006 estableció reservas de suelo industrial para 30 años en el polígono de Valcorba.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 1 de abril de 2008