Decenas de peces muertos aparecieron ayer en el río Manzanares. El Ayuntamiento explicó el suceso por "una bajada brusca de oxígeno en el río". Al darse cuenta, los técnicos pusieron a funcionar "los dos aireadores de las presas tres y cuatro para devolver oxígeno al agua". La causa de ese descenso "aún se desconoce", aunque "los expertos están analizándolo", según el Ayuntamiento, que no descarta que emerjan más cuerpos de peces muertos porque "tardan en subir desde el fondo".
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 10 de abril de 2008