Un hombre de 41 años fue detenido ayer por la tarde después de cometer un robo con violencia e intimidación en una panadería del distrito de Moncloa. El supuesto autor disparó al dueño del establecimiento en un muslo, pero logró ser retenido por sus familiares hasta la llegada de la policía, según explicó un portavoz de Emergencias Madrid.
Los hechos ocurrieron sobre las 19.30, en el número 34 de la calle de Nueva Zelanda, en el barrio de Puerta de Hierro, en el interior de la pastelería y panadería El Rey. A esa hora entró un hombre que obligó a dar todo el dinero de la caja a la dueña del establecimiento, de 59 años, y a su hija. Ambas se resistieron. En ese momento, el ladrón sacó una pistola y pegó con la culata a la propietaria.
Al oír lo que estaba pasando, salió del horno el dueño del establecimiento. Como el ladrón salió corriendo, el hombre le siguió a la carrera hasta que le dio alcance a unos 25 o 30 metros de la tienda. Le siguieron sus dos familiares. Se produjo entonces un forcejeo en mitad de la calle, durante el cual el presunto ladrón efectuó al menos tres disparos. Uno de ellos impactó en un muslo del dueño de la pastelería. Eso no impidió que los tres familiares golpearan al asaltante y le redujeran hasta que llegó la policía.
Los agentes de un coche patrulla de la comisaría de Moncloa detuvieron al presunto atracador y recuperaron el arma. Tras cachearle, le trasladaron al servicio de urgencias del hospital Puerta de Hierro para ser curado de las heridas leves que sufría, según un portavoz de la Jefatura Superior de Policía.
El panadero y su esposa fueron trasladados en ambulancia al hospital Clínico. La mujer sufría una fuerte contusión en la cabeza como consecuencia del culatazo recibido.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 15 de abril de 2008