El Tribunal de Luxemburgo emite sentencias que están deteriorando la "Europa social", criticó ayer el ex presidente del Parlamento Europeo, Josep Borrell, en la presentación barcelonesa del libro dirigido por él, Europa en la encrucijada.
Borrell puso como ejemplo a lamentar la jurisprudencia que bendice que un trabajador polaco en Alemania tenga salario y sistema social polaco, en vez de alemán.
Borrell también destacó que persiste la "demanda de Europa": "El mundo pide Europa porque es consciente de que si no, se va a producir un enfrentamieento entre una potencia en declive, que es Estados Unidos, y un mundo emergente en el que se encuentran China e India", aseguró. Y su antiguo colega en el Gobierno y presidente del CIDOB, Narcís Serra, tomó pie en esa reflexión para sostener que "la prioridad" de la UE debe ser "reforzar" las políticas exterior común y de defensa, "tal como reclaman los ciudadanos".
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 19 de abril de 2008