Quizá fue por el morbo de ver a los jugadores del Barcelona hacerles el pasillo a los del Real Madrid. O por la curiosidad de comprobar si el campeón de la Liga era capaz de vencer a los catalanes (y lo hizo, 4-1). El caso es que el encuentro del miércoles fue seguido por 9.264.000 espectadores y obtuvo una cuota del 46,7%. Fue el partido de fútbol con más audiencia desde mayo de 2006; el mejor Madrid-Barça desde el 20 de noviembre de 2004, y el espacio de mayor audiencia de Telecinco desde junio de 2001. El partido superó en casi 4,5 millones de espectadores a la suma de la audiencia conseguida por la serie El internado (Antena 3), que obtuvo un buen resultado, 3.310.000 espectadores, y la película El pianista (TVE-1), que vieron 1.465.000 personas.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 9 de mayo de 2008