Es habitual que la oposición arremeta contra el Gobierno por su gestión. Pero ayer, el portavoz de CiU en el Parlament llegó más lejos para instalarse en la descalificación. Oriol Pujol, por dos veces, se refirió al Gobierno catalán y a su funcionamiento interno como el de una "casa de putas" por la gestión que ha hecho de la situación de sequía. Textualmente, el hijo del ex presidente Jordi Pujol, en nombre de CiU, señaló: "El Gobierno catalán y el Gobierno central compiten para ver quién lo hace peor. Esto es lo más parecido posible a una casa de barrets
. ¿Qué más tiene que pasar?".
El estilo de Oriol Pujol sorprende por lo descortés, pero no por ser novedoso. El 3 de mayo de 2007 el diputado de Convergència i Unió se refirió al presidente catalán, José Montilla, como "bèstia grossa", expresión catalana que alude a un animal enorme. El calificativo hacia el presidente salió durante una acalorada discusión parlamentaria entre Pujol y el consejero de Cultura, Joan Manuel Tresserras. En un comunicado de prensa de CiU se reiteró ayer en la expresión de "casa de putas" y no hubo retractación alguna.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 21 de mayo de 2008