Los operarios municipales retiraron ayer la cruz de Gaudí de la torre de Bellesguard, que había sido sujetada con una grúa desde hace casi dos semanas al sufrir un grave riesgo de desplomarse.
La cruz y su pináculo, de unos cinco metros de altura, estaba aún ayer en el jardín de la familia Guilera, protegida por una estructura de hierro. La intención del Ayuntamiento es restaurar el símbolo, que pesa entre cuatro y cinco toneladas, para reparar tanto sus grietas como el trencadís, al que con el paso del tiempo se le han ido rompiendo trozos de cristal y de cerámica.
Tras cubrir la cruz con unas maderas y recubrirla de plástico sujeto con cuerdas, los operarios separaron el pináculo de la torre hasta bajar la cruz. Además de restaurar el símbolo, los técnicos repararán la torre, que se ha inclinado hacia adelante con el paso del tiempo. La torre de Gaudí está declarada Bien Cultural de Interés Nacional y es muy visitada por turistas.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 23 de mayo de 2008