Un perito judicial ratificó ayer su informe sobre 25 facturas pagadas por el Instituto Valenciano de la Exportación (Ivex) por distintas actuaciones de Julio Iglesias en los años 1998 y 1999 al amparo de un contrato por el que el cantante representaba la imagen de la Comunidad Valenciana. Según él, las facturas son formalmente correctas, deducibles y están debidamente contabilizadas. Solo le faltan por cotejar ocho y el juzgado pondrá a su disposición en breve la documentación incluida en la causa. Los pagos al artista están siendo investigados por posible estafa y fraude al haberse detectado irregularidades que apuntan a la posibilidad de que se hubieran abonado servicios que no se realizaron. El PSPV presentó la querella y la causa está, si no se producen novedades inesperadas, consumiendo las últimas diligencias que darán paso a la imputación de los responsables, si los hay, o al archivo. José María Tabares, ex director del Ivex cuando se cerró la operación con Julio Iglesias, es el principal imputado, contra el que se presentó la querella.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 31 de mayo de 2008