El propio primer ministro checo, Mirek Topolánek, llegó a afirmar que no se jugaría ni 100 coronas (unos cuatro euros) por el sí. Reunidos en Bruselas, los líderes europeos anunciaron que ahora es imposible seguir adelante con el proceso de ampliación.
Editorial en la página 34
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* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 21 de junio de 2008