El triunfo de la selección española en la Eurocopa tendrá hoy reflejo en las parrillas de las televisiones españolas. Las principales cadenas acomodan sus parrillas a la llegada de los campeones a España y trasladan sus platós a la madrileña plaza de Colón, el lugar de concentración de los aficionados durante todo el campeonato.
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Sucesivos informáticos se ponen en pie al escuchar sus nombres, y una masa de 10.000 seguidores ruge para homenajearles por su trabajo. En una cita como el Blizzard Worldwide Invitational, que se celebró por primera vez en Europa este fin de semana, en París, los héroes no son los guerreros que se baten el cobre en pantallas de varios metros de altura.
Los periodistas españoles y argentinos que cubren la campaña presidencial estadounidense estos días han tenido una especie de déjà vu. En diversos actos electorales, una serie de periodistas vestidos de forma impecable (traje negro y corbata y portando gafas del mismo color) han lanzado preguntas que nada tienen que ver con la seriedad habitual que rodea este tipo de encuentros.
Cuatro renueva su programación con una apuesta doble: Visto y oído, magacín de actualidad presentado por Raquel Sánchez Silva y Joaquín Prat, y Fifty fifty, concurso con Silvia Jato al frente.