El Ministerio de Fomento ha asegurado a la Xunta que el futuro viaducto del AVE sobre la desembocadura del Ulla, a la altura de Carril, no afectará al banco de almeja y demás moluscos y mariscos que se recogen en la zona. El Gobierno central defiende que la modificación del trazado que a principios de junio acordó realizar, en un tramo del río tan importante para la economía local, no dañará la actividad extractiva ni durante las obras ni cuando la infraestructura (un viaducto sobre 11 pilares que se asentarán en el cauce) esté terminada.
Esto fue lo que aseguró ayer en el Parlamento gallego el secretario general de la Consellería de Pesca, Miguel López Sieiro, en respuesta a una pregunta del diputado del BNG Bieito Lobeira sobre el impacto medioambiental que tendría este enorme puente. El representante de la consellería dijo que Fomento le ha dado "todas las garantías". No obstante, por si "pese a las medidas preventivas" que tome la constructora finalmente la obra afecta a los bancos marisqueros, López Sieiro reconoció que la Xunta ha pedido al Gobierno central que "se habiliten medidas compensatorias". Lobeira sugirió que estas medidas deben pactarse con los perjudicados.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 1 de julio de 2008