Los agentes del Cuerpo Nacional de Policía iniciaron ayer en el aeropuerto de El Prat una huelga de celo que realizarán los miércoles y jueves de julio en demanda de mejoras laborales. La protesta consistió en controlar el tráfico de pasajeros de los vuelos internacionales cumpliendo a rajatabla las normas. El esmero de los agentes provocó leves retrasos y más colas para embarcar de las habituales a primera hora de la mañana, cuando coinciden la mayoría de los vuelos internacionales que parten de Barcelona. AENA restó importancia a las aglomeraciones y dijo que la operatividad del aeropuerto no se vio afectada.
La presencia de miembros de los sindicatos y periodistas en una zona restringida de embarque motivó un rifirrafe con la Guardia Civil, que los identificó y los expulsó del área. La huelga se trasladará hoy al aeropuerto de Girona.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 3 de julio de 2008