El último trimestre de 2007 fue el principio del fin para el sector del hormigón. Hasta entonces, la producción en Galicia crecía -un 2,67% más que en 2006-, mientras que en España caía un 2,6%. Desde octubre de 2007, sin embargo, la actividad de las empresas productoras de hormigón siguió el rumbo de la estadística española y disminuyó un 1% respecto al mismo periodo del año anterior.
En el primer trimestre de 2008, la producción cayó un 30%, sin tener en cuenta la semana en la que el sector estuvo parado debido a la huelga de transporte. Durante esos días, las pérdidas llegaron al 50%.
Las cifras las da Anefhop, patronal que representa el 80% de la producción de hormigón preparado en Galicia. Su director, Julio Paredes, asume que la producción seguirá decreciendo en los próximos años. "Lo único que me anima de 2008 es que 2009 va a ser peor", ironizó.
La crisis económica ya está afectando a las 141 plantas de producción que pertenecen a Anefhop porque "deberán reducir, como mínimo, un 14% de su plantilla", afirmó Paredes. Las empresas que dependen de esta patronal -44 de las 79 que hay en Galicia- correrán mejor suerte. De momento, no tiene que cerrar ninguna, como ya ha sucedido en Andalucía, aunque el director de Anefhop advirtió que "puede pasar si la crisis continúa". A eso, se le une que las compañías de hormigón preparado sufren unos plazos de pago muy altos, de hasta 210 días en algunos casos, de manera que si las empresas constructoras quiebran, quedarán grandes cantidades de dinero sin pagar.
Para tratar de atenuar el declive del sector y mejorar las perspectivas de futuro -"no se atisba nada que nos haga ver esto con optimismo moderado", reconoció Paredes-, Anefhop pide a las Administraciones Públicas que construyan carreteras de hormigón. El director de la patronal aseguró que "cuando el precio del barril de petróleo supere los 70 dólares", el pavimento de hormigón resultará "más barato en cuanto a mantenimiento y duración". A diferencia del asfalto, sostiene Anefhop en favor de su sector, el hormigón no contamina la base del terreno y, además, como es un producto nacional, no conlleva "ser dependientes del exterior".
La patronal, que hoy celebra su asamblea anual, también propone bajar los impuestos, disminuir las cuotas de la Seguridad Social y, sobre todo, aumentar las inversiones en obra pública.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 10 de julio de 2008