La Consejería de Sanidad de la región de Murcia quiere aclarar, en deferencia hacia los lectores, la definición como "modelo privatizador" que utiliza EL PAÍS para referirse al modelo de gestión para los nuevos hospitales en construcción en marcha desde hace cuatro años en la región de Murcia, en la noticia publicada el martes, 15 de julio, titulada Murcia secunda el modelo de privatización sanitaria del PP. Hace ya cuatro años se creó, en el seno de la Comunidad Autónoma de la Región de Murcia, la Gestora de Infraestructuras Sanitarias (Giscarmsa), empresa pública y dependiente de la Consejería de Sanidad, cuyo capital procede íntegramente del Gobierno regional. El modelo de gestión mantiene la asistencia pública directa de los nuevos hospitales gestionada por el Servicio Murciano de Salud. En ningún caso el modelo Giscarmsa es un modelo privatizador ya que la empresa que gestiona es totalmente pública, siendo los servicios gestionados por la empresa de naturaleza complementaria.
El modelo de la región de Murcia es una apuesta valiente por la gestión pública, mediante un sistema en el que Giscarmsa actúa de vehículo entre la Administración y los hospitales públicos. Es un modelo idéntico al de Asturias (Gispasa). Decir que Giscarmsa actuará como una empresa privada es establecer una comparación sin fundamento, y sostener que su gestión supone una privatización es confundir a los lectores, ya que la gestión de una empresa pública, dependiente de la Consejería de Sanidad y con todo el capital procedente de la Administración, no se puede considerar una gestión privada.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 17 de julio de 2008