Los vecinos que residen en las calles cercanas a la plaza de América, al norte de Alicante, vivieron ayer más de dos horas de incertidumbre. A las 11 de la mañana, una excavadora pinchó una tubería de gas de media presión provocando una "importante fuga", según los bomberos, que mantuvo a los residentes en vilo hasta casi las dos de la tarde, ante la amenaza de una posible explosión.
"Salí al balcón porque olía mucho a gas, y me encontré con que todas las calles estaban cortadas", apuntó una vecina que vive en la calle de la Dehesa, colindante con el punto de fuga. "Había un policía gritando 'corran, corran, puede haber una explosión", puntualizó la mujer que, asustada, llamó a su hija, que vive dos pisos más abajo, para alertarle de la situación.
Tal y como especificaron desde el vecindario, los agentes acordonaron la zona para que todo el mundo se alejara del área afectada. "Les mandaban para arriba, lejos de las cintas de seguridad", comentaron.
Los bomberos llegaron al lugar del percance sobre las 11.30. Al comprobar el estado de la tubería, procedieron a balizar una zona de unos 60 metros alrededor del punto de fuga, es decir, la calle de la Dehesa, la plaza de América y perpendiculares. Asimismo, procedieron a la evacuación de los comercios y cafeterías en ese radio y pidieron a los vecinos que se quedaran en casa y cerraran todas las ventanas y los balcones.
La avería fue arreglada casi una hora y media después por los técnicos de Gas Natural. Los bomberos, que no se movieron del lugar como medida preventiva, afirmaron que a las dos de la tarde estaba ya todo en orden.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 13 de agosto de 2008