Es lógico que la cocina de vanguardia exista gracias a la cocina tradicional. La vanguardia es una expresión personal, creativa, pero evolutiva de las bases aprendidas. De la olla de Pedralba me surgió, en el 2007, un plato de diferentes cardos, llamado Tallos en El Poblet, y que tenía como guarnición cardos, pencas, y otros muchos, como la borraja y la acelga. Los planteé cocinados en su justo punto. Con un fondo de olla de Pedralba, perfectamente desgrasado y suavizado. Se expresan con más personalidad, si cabe, los vegetales de esta manera.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 14 de agosto de 2008