Dos investigaciones distintas han reventado dos entradas de cocaína por el puerto de Valencia. Una procedía de Bolivia. Entre miles de tablones de madera supuestamente importada para parqué se escondían 120 kilos de polvo blanco. La otra, también procedente de Suramérica, era una remesa de muebles, y entre cojines de sofás y patas de mesas y sillas estaba oculta la droga, 130 kilos. Ambas operaciones han sido realizadas por la Policía Nacional. La primera, que culminó en la mañana del miércoles con la localización y apertura del contenedor cargado de tablones, es una operación que nace de una investigación realizada por la Audiencia Nacional. La segunda, de un juzgado de Sueca.
Ambas operaciones permanecen abiertas y provisionalmente son seis los detenidos: dos por la operación de los tablones y cuatro por la de los muebles.
La policía nacional tenía ayer previsto practicar varias entradas y registros en los domicilios particulares de los implicados y en las naves a las que se suponía que debían trasladarse los cargamentos de droga.
La policía investigaba desde hace varios meses las actividades comerciales de un ciudadano austríaco que durante años residió en Bolivia y que recientemente se estableció en España para importar madera del país suramericano.
Según fuentes de la investigación policial, la coartada era bastante burda, máxime cuando se ha comprobado la escasa calidad de los listones importados. La policía nacional no descarta que se practiquen nuevas detenciones en los próximos días.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 15 de agosto de 2008