Una niña de origen magrebí murió ayer por la tarde, de forma accidental, tras ser atropellada por la furgoneta que conducía su padre. El suceso ocurrió en el área de servicio El Llobregat, de la autopista AP-7, a la altura de Castellbisbal (Barcelona). El hombre no se dio cuenta de que su hija se encontraba escasos metros por detrás del vehículo y, mientras realizaba una maniobra de marcha atrás, la arrolló.
Tres patrullas de los Mossos d'Esquadra, cinco dotaciones de los bomberos y una ambulancia llegaron a la estación de servicio poco después de las seis de la tarde. Los servicios sanitarios no pudieron hacer nada por salvar a la menor, que murió de camino al hospital.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 24 de agosto de 2008